En 1977 se legalizaban las Organizaciones Sindicales. La CNT, en un mitin multitudinario en la plaza de toros de San Sebastián de los Reyes, congregaba a decenas de miles de simpatizantes. Posteriormente en Barcelona en las Jornadas Libertarias organizadas por la CNT de Cataluña y que duraron varios días, más de 500.000 personas participarían en los actos. Todo esto no podía pasar desapercibido para los servicios de inteligencia postfranquistas, había que destrozar la credibilidad del Movimiento Libertario y en especial de la C.N.T., el caso SCALA se estaba cociendo.
En enero de 1977 son detenidas en un bar de Barcelona 16 personas. Se las acusa de la reconstrucción de la FAI. Las redadas continúan en Murcia y Valencia. Los detenidos serían puestos rápidamente en libertad. Al grupo de detenidos en Murcia se les ocupan armas y explosivos facilitados por el confidente de la policía Joaquín Gambín.
El 13 de septiembre la policía detenía a 13 supuestos integrantes de las Juventudes Libertarias acusados de los sucesos de las Ramblas de Barcelona del día 11, día de la Diada que se saldó con un muerto tras la actuación de la policía. Estos detenidos serían posteriormente puestos en libertad sin cargo alguno.
En noviembre la CNT localizó y desenmascaró a un periodista norteamericano, probablemente a las órdenes de algún servicio de información, que se encargaba de difundir falsas noticias a nivel internacional sobre el sindicato anarcosindicalista.
Concretamente la de un supuesto complot para secuestrar al ministro de Justicia Landelino Lavilla (UCD). Tras descubrirse la provocación el periodista "desaparece" no sin que antes varios periódicos nacionales publicaran la noticia.
A las cuatro y media de la tarde del 11 de diciembre un militante del sindicato de espectáculos de la CNT de Barcelona descubría, descolgándose por una ventana de la sede del sindicato, a Enrique Iglesias Muñoz de 19 años y afiliado a la sección de figurantes del sindicato de espectáculos. Acababa de robar carnets en blanco y parte del fichero del sindicato. Tras el interrogatorio que se le efectuó en el mismo reconoció que actuaba por encargo de Felipe Agramonte Gómez de 45 años de edad y también afiliado. Iglesias había sido detenido en dos ocasiones, el 27 de marzo de 1977 acusado de un atentado contra los locales de Fuerza Nueva en la C/Canuda y el 1 de septiembre, bajo la acusación de lanzamiento de cócteles molotov contra la policía. Por esas fechas conoció a Felipe Agramonte que le convenció para que se afiliara a la CNT y trabajara con él. En tres ocasiones había robado carnets y documentación del sindicato.
Agramonte, presionado por el sindicato reconocería que estaba encuadrado en la 5a centuria de la guardia de Franco desde hacía 20 años y reconoció su participación en un atentado que se produjo en Octubre de 1977 en los locales del pasaje de la Paz.
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